viernes, 30 de mayo de 2025

 

EL REMANENTE DE DIOS

Amadeo Albuquerque Lara

La doctrina de un remanente reservado para Dios está atestiguada tanto en el Antiguo, como en el Nuevo Testamento. El Remanente de Dios es el tema de la preservación y fidelidad divina. En el Antiguo Testamento se refiere a un grupo fiel de israelitas preservado a través de juicios y calamidades; mientras que en el Nuevo Testamento, significa la fidelidad de los seguidores de Cristo dentro de la Iglesia. En ambos contextos, el Remanente sirve como un testamento por medio de la eterna misericordia y pacto con Dios.  El tema del remanente prevalece en los escritos de muchos de los profetas y diferentes escritores en el Antiguo Testamento, y en los evangelistas y escritores en el Nuevo Testamento, con el mismo significado.

“El término "remanente"  en griego del Nuevo Testamento, λοιπός (loipós) se usa para describir a quienes quedan después de una catástrofe o desastre, o para identificar al pueblo fiel de Dios. La palabra "remanente" en hebreo se traduce como שארית (she'erit), que significa "resto" o "remanente” (Crédito: Search Labs). En ambos idiomas usados tanto en el Antiguo, como en el Nuevo Testamento, el concepto de “remanente” comparte el mismo significado.

El remanente en el Antiguo Testamento

En el Antiguo Testamento, el remanente concierne a Israel. Los profetas Isaías, Jeremías, Amos y Miqueas; así como en la literatura del post-exilio, como Esdras, Nehemías, Haggeo, y Zacarías, enfatizan que a pesar de la degradante apostasía del pueblo de Israel, Dios preserva un remanente fiel a su Palabra. Estos escritores del post-exilio consistentemente se refieren a los judíos que retornaban de la cautividad de Babilonia, como un remanente; porque no todos regresaban.

 El mismo concepto del remanente lo encontramos en el primer libro de Reyes, cuando el profeta Elías, en el siglo IX a. C., cree ser el único profeta de Dios dejado con vida, porque a los demás profetas los hijos de Israel los han matado; y que además, los sicarios de Jezabel lo buscan para matarlo:

He sentido un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares, y han matado a espada a tus profetas; y sólo yo he quedado, y me buscan para quitarme la vida” (1ro Reyes 19:10 RVR 1960).

No obstante, Dios le responde a Elías que tome ánimo, porque hay un remanente fiel a Dios: “Y yo haré que queden en Israel siete mil, cuyas rodillas no se doblaron ante Baal, y cuyas bocas no lo besaron” (1ro Reyes 19:18 RVR 1960).

Y el apóstol Pablo, en los años 56-58 d.C., quien cita 183 veces el Antiguo Testamento en sus escritos, recuerda el caso del profeta Elías en cuanto al remanente de Israel aun ahora que estamos bajo la gracia. Dios en su misericordia no olvida su pacto con su pueblo, porque la salvación es por gracia, no por obras. La fidelidad de Dios se destaca en la doctrina del remanente del pueblo de Israel que guarda el pacto y que no se olvida de sus promesas.

No ha desechado Dios a su pueblo, al cual desde antes conoció. ¿O no sabéis qué dice de Elías la Escritura, cómo invoca a Dios contra Israel, diciendo: 3 Señor, a tus profetas han dado muerte, y tus altares han derribado; y sólo yo he quedado, y procuran matarme? 4 Pero ¿qué le dice la divina respuesta? Me he reservado siete mil hombres, que no han doblado la rodilla delante de Baal. 5 Así también aun en este tiempo ha quedado un remanente escogido por gracia” (Romanos 11:2-5 RVR 1960).

El número 7 es eminentemente simbólico en el sentido espiritual. representa la perfección, la totalidad, el cumplimiento y la renovación a través de toda la Biblia; por tanto, los “siete mil hombres” a los que se refiere Pablo representan el remanente que permanece fiel al Pacto. Pablo se refiere al pueblo de Israel, aun cuando ha rechazado al Mesías y ha sido infiel, Dios ha guardado un remanente escogido por gracia.

Otro profeta que menciona el remanente de Dios es Isaías, quien en el siglo VIII a. c., le advierte a Israel que aunque su población sea como la arena del mar, solamente un remanente regresará del exilio (Isaías 10:22). Isaías anuncia la cautividad de las tribus del norte, por parte de Asiria. La doctrina del remanente es un tema recurrente tanto en el Antiguo, como en el Nuevo Testamento, significando que sólo un pequeño grupo de fieles a los mandamientos de Dios serán protegidos por el Pacto.

También el profeta Jeremías, en el siglo VII a. C., alienta al pueblo de Dios con la siguiente profecía: “Y yo recogeré al resto (remanente)  de mis ovejas de todas las tierras adonde las eché, y las haré volver a su redil; y crecerán y se multiplicarán. 4 Y pondré sobre ellas pastores que las apacienten; y no temerán más, ni se espantarán, ni faltará ninguna, dice Jehová” (Jeremías 23:3-4). El paréntesis explicativo es mío). (Crédito: Jewish Virtual Library).

El profeta Miqueas, en el siglo V a. C., destaca el tema del remanente enfatizando que un grupo de fieles permanecerá después del juicio, que confíen en la esperanza de su restauración.

Algún día, oh Israel, yo te reuniré; juntaré al remanente que quedó. Volveré a reunirlos como ovejas en su redil y como un rebaño en su pastizal. ¡Sí, su tierra se llenará nuevamente de ruidosas multitudes! 13 Su líder irrumpirá, se pondrá al frente y los sacará del destierro, a través de las puertas de las ciudades enemigas, y los llevará de regreso a su propia tierra(Miqueas 2:12-13 NTV).

Este remanente con frecuencia se presenta como un grupo purificado que experimentará las bendiciones y la restauración de Dios. Teológicamente, el remanente significa la misericordia y fidelidad de Dios con sus promesas del Pacto. (Crédito: Precept Austin).

“En términos bíblicos, el “remanente” se refiere a un reducido grupo fiel de personas que permanecen verdaderos ante la enseñanzas de Dios, aun cuando la mayoría se ha apartado por completo. Este concepto está presente tanto en el Antiguo, como en el Nuevo Testamento para describir a un grupo escogido y preservado a través de pruebas y tribulaciones, a menudo con promesas de futura restauración o salvación” (Search Labs/ AI Overview). Traducción personal por el autor de este escrito.

El remanente en el Nuevo Testamento

En el Nuevo Testamento el Señor Jesús incluye la doctrina del remanente al final del Sermón del Monte, en donde enseña los requisitos para ser ciudadanos del Reino de los cielos. Mateo cita la metáfora de la puerta estrecha y el camino angosto que conducen a la vida eterna, según Jesús.

Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; 14 porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan” (Mateo 7:13-14 RVR 1960).

El evangelista Lucas también cita las palabras de Jesús en cuanto al pequeño grupo de los que se salvan y entran en la vida eterna.

Pasaba Jesús por ciudades y aldeas, enseñando, y encaminándose a Jerusalén. 23 Y alguien le dijo: Señor, ¿son pocos los que se salvan? Y él les dijo: 24 Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán” (Lucas 13:22-24 RVR 1960).

En el pasaje de Lucas el Señor Jesús enfatiza el esfuerzo necesario para entrar por la puerta angosta. Cristo no vino a abrir las puertas a multitudes con tal de que engrosaran el número de los que lo seguían. Él sabía que muchos no creerían en sus enseñanzas. Lo aseguró a sus discípulos en el Sermón de las Parábolas (Mateo 13, Marcos 4 y Luc. 8 RVR 1960). Ni tampoco él forzaba a las multitudes para que creyeran en él. Así que solamente un remanente creyó y quedó fiel. Cuando las multitudes lo seguían, Jesús sabía que sólo un pequeño grupo le era fiel.

“Desde entonces muchos de sus discípulos volvieron atrás, y ya no andaban con él. 67 Dijo entonces Jesús a los doce: ¿Queréis acaso iros también vosotros? 68 Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. 69 Y nosotros hemos creído y conocemos que tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente” (Juan 6:66-69 RVR 1960).

La respuesta del apóstol Pedro a la pregunta de Jesús, contiene la esencia del remanente. Simón Pedro habla en nombre de los doce: “nosotros hemos creído y conocemos que tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente”. Los demás que “volvieron atrás” no formaban parte del pequeño grupo del remanente de sus seguidores.

En el Nuevo Testamento, después de la muerte y reurrección de Jesucristo, el concepto del remanente se extiende a la comunidad cristiana primitiva, que comprendía tanto a judíos, como a gentiles. El apóstol Pablo enfatiza la doctrina del remanente en Romanos como ya se ha citado; y el apótol Juan también lo mantiene en el libro de Apocalipsis.

Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto (remanente) de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo” (Apocalipsis 12:17 RVR 1960). Paréntesis es mío.

El resto de la descendencia de la mujer se refiere al remanente de los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo. Los apóstoles conocían la doctrina predicada por su Maestro y ellos la enfatizan en sus enseñanzas. En el Nuevo Testamento el remanente a menudo se asocia con las promesas del perdón, la vida eterna, el eterno amor de Dios. La futura restauración del Reino de Dios, y la tierra nueva y los cielos nuevos reservados para los que luchen hasta el fin.

CONCLUSIÓN

Contra cualquier doctrina que anule el concepto del remanente de Dios, las referencias a este concepto han sido documentadas en este estudio sobre la doctrina extendida tanto en el Antiguo, como en el Nuevo Testamento. No se trata de ser sionista o proisraelí al documentar la doctrina del remanente. Se trata de una doctrina bien cimentada en el Antiguo Testamento y defendida con mucha claridad en el Nuevo Testamento por el mismo Señor Jesucristo en cuanto a la fidelidad y sufrimientos de sus seguidores; y el apóstol Pablo en el libro de Romanos la confirma con toda claridad refiriéndose al remanente israelí, así como el remanente en el Nuevo Testamento.  Así mismo, el apóstol Juan en el libro de Apocalipsis se refiere a la lucha del diablo en contra del pequeño grupo descendiente de la mujer: “Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo” (Apocalipsis 12:17 RVR 1960). Resaltado es mío para enfatizar en el concepto del remanente.

La doctrina del remanente se refiere a un pequeño grupo dentro del pueblo de Dios en el Antiguo  y en el Nuevo Testamento. Este estudio ha citado a profetas de reconocida autoridad tanto en el Antiguo, como en el Nuevo Testamento; puesto que el mismo Jesucristo declara que son pocos los que se salvan (Lucas 13:23 RVR 1960). Jesús no vino a ofrecer una salvación universal, como lo proclaman algunos, porque él dice que muchos procurarán entrar por la puerta angosta, pero no podrán: “Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán” (Lucas 13:24 RVR 1960).

En otro pasaje del evangelio Cristo reclama a una multitud que lo seguían porque les había dado de comer. Estas son las palabras textuales de Jesús: "Les digo la verdad, ustedes quieren estar conmigo porque les di de comer, no porque hayan entendido las señales milagrosas" (Juan 6:26 NTV). Jesús no es partidario de llenar templos a megaiglesias que predican el “Evangelio de la Prosperidad”. Jesús fue claro en cuanto al remanente: “No todo el que me dice: «Señor, Señor», entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” (Mateo 7:21 RVR 1960). Él busca a los pocos que se esfuerzan por entrar en el Reino de los cielos y que perseveran hasta el fin: “Mas el que persevere hasta el fin, este será salvo” (Mateo 24:13 RVR 1960).

 

REFERENCIAS

Bible Study Tools > Remnant meaning

Biblia Nueva Traducción Viviente

Biblia Reina Valera 1960

Encyclopedia Britannica: The Remnant of God

Jewish Virtual Library > Remnant of Israel

Precept Austin > A Call to the Remnant

Precept Austin > Romans 11:1-4 Commentary

Researach Lab/AI Overview > The Remnant in biblical terms

 

 

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