sábado, 19 de diciembre de 2015


LAS MUJERES DE LA BIBLIA EN LA narrativa NICARAGÜENSE
Amadeo Albuquerque Lara

Los relatos de mujeres, tal como se cuentan en la Biblia, han inspirado a algunos escritores nicaragüenses para imprimirles sus propios puntos de vista y darles un nuevo enfoque a tono con los derechos que ellas tienen actualmente. Los relatos bíblicos basados en la concepción patriarcal, han tenido un giro libre de prejuicios contra la mujer. Incluso, la radioemisora evangélica, “Radio Cepad” (1120 amplitud modulada), tiene un programa dirigido por mi hija, Dámaris Albuquerque Espinoza, el cual lleva por nombre “Mujeres de la Biblia”,ella enfatiza en los valores de estas mujeres que fueron víctimas de una sociedad patriarcal, cuyo contexto machista opacaron su verdadera identidad y valentía.

El escritor nicaragüense, Sergio Ramírez Mercado, ha escrito un libro el cual lleva por título Sara, la escritora y poeta, Isolda Rodríguez Rosales, también acaba de publicar el libro titulado Las diosas de Elam. Mientras que Ramírez Mercado se concentra en la mujer de Abram (Abraham posteriormente), en cuyo libro vindica a la Sarai de la Biblia, Rodríguez Rosales nos presenta a varias mujeres, las que reciben nombre en la Biblia y las que aparecen sin nombre. Entre las mujeres que Isolda vindica están: La mujer de Sunem, Miriam, La mujer de Lot, La mujer de Samaria, Eva (llamada Lilith por Isolda), Sara, hija de Ragüel, la mujer sin nombre (la pecadora), y otras más.

La narrativa nicaragüense ha dedicado atención especial a la mujer. Por ejemplo, la Doctora en Literatura, Nydia Palacios Vivas, se ha dedicado a dar la palabra a las mujeres, pues se ha especializado en Estudios de la mujer, ha escrito una serie de ensayos titulados “Escritoras ejerciendo la palabra”; y también hay que destacar la valoración que hace la escritora y poeta Michell Najli, de los escritos de Claribel Alegría, Rosario Aguilar y Ana Ilse Gómez. Es decir, la figura de la mujer ha recobrado su lugar en la literatura nicaragüense, sin dejar de lado las mujeres de la Biblia.

Pero no solamente la narrativa nicaragüense se ocupa de recobrar los derechos de la mujer. La escritora Nélida Piñòn (Río de Janeiro, 3 de mayo de 1937), premio Príncipe de Asturias 2005, a quien el escritor Sergio Ramírez dedica su novela Sara, ha escrito un libro titulado Voces del desierto. Esta novela , reinventa la fascinación de Las mil y una noches, en donde Sherezade concatena una historia tras otra para salvar su vida y la de las demás mujeres del dominio del Califa. Sherezade está muy consciente que si pierde la hilación de sus cuentos, perderá la vida y, con ella, la de las demás mujeres del reino del Califa. Por eso, la novelista Nélida Piñón destaca la astucia de Sherezade y la presenta como una mujer inteligente y luchadora por el derecho femenino.

La sección Cultura de La Prensa titula: “Sara, la novela de Sergio Ramírez un diálogo del alma femenina”, en ocasión de la presentación de la novela Sara. La periodista y poeta, Marta Leonor González, al referirse a la novela de Sergio Ramírez afirma que “Sara, es una mujer rebelde, aguda y que utiliza la risa para defenderse, esta sobreviviendo a ese mundo de machos”, y que además “dio voz a una mujer estigmatizada por sumisa que quiso revelarse(sic) contra una sociedad patriarcal y tener un lugar en el mundo distinto al que le habían asignado”.

El doctor Ramírez “confesó que desde su juventud ha sido un lector asiduo de la Biblia, y le llamó la atención la vida de Abraham, Sara, y la esclava Agar, así como su paso por Sodoma y Gomorra.” “El novelista también reconoció que adentrarse en las voces de las mujeres ha sido un reto, cada vez mayor. “Uno conquista terreno cuando como escritor es capaz de meterse en el otro, en terreno desconocido, y cómo se comporta una mujer.”
La narración bíblica acerca de la vida de Sarai (Sara) como una mujer sumisa se encuentra en el libro de Génesis, capítulo 12, versículos 10 en adelante, en donde Abram (posteriormente llamado Abraham) cuando entra en Egipto por razón de una hambruna en su tierra, obliga a Sarai a decir que ella es su hermana, porque tiene miedo que los egipcios lo maten para quedarse con su mujer, Sarai. Abram juzga que por la hermosura de su mujer los egipcios la querrán para ellos. Pero Faraón la toma por mujer, posteriormente se da cuenta del engaño y se la devuelve con las riquezas que Abram había adquirido gracias a su mujer.

Luego, en el mismo libro de Génesis, en el capítulo 20 y en los versículos 1 al 5, en donde ya aparecen Abraham y Sara, con estos nombres, se encuentran en la presencia del rey Abimelec, Abraham otra vez obliga a Sara a afirmar que ella es su hermana, por la misma razón anterior, cuando el caso de Faraón.

Pero también el mismo libro de Génesis, capítulo 16 nos narra una historia triste. Resulta que Sara no puede tener hijos e induce a su marido Abraham a que tome por mujer a su esclava Agar. Ésta concibe un varón, pero despierta los celos de su ama, Sara. La consecuencia es que su ama la despide, pero un ángel la obliga a volver al hogar de Abraham y Sara, con la condición de someterse al trato de Sara. He aquí el menosprecio de la dignidad de Agar por el hecho de ser esclava. El contexto en que suceden estos hechos es una sociedad patriarcal en la cual la mujer es un objeto manipulado por el hombre.


Por esta razón, Sergio Ramírez se ha inspirado en esta historia, de la cual tiene pleno conocimiento, pues como él mismo confiesa, desde muy pequeño ha leído la Biblia. Con justa razón, estos escritores han dado una nueva mirada a las mujeres de la Biblia, como es el caso también de la escritora Isolda Rodríguez Rosales, quien ha incursionado en la narración de las mujeres de la Biblia, para otorgarles el lugar que se merecen en una sociedad nueva, en la cual han encontrado un nuevo concepto de su feminidad, muy diferente a la categoría de personas sometidas a la masculinidad.