martes, 10 de noviembre de 2015



LOS ARGUMENTOS DEL VERBO
Amadeo Albuquerque Lara

Antes de entrar de lleno en el tema de los argumentos del verbo, es necesario brindar algunos antecedentes en el estudio del verbo y sus complementos. También relacionado con este tema está las clasificaciones de las “partes de la oración”. Por ejemplo, Platón afirma que sin onómato y rema, sustantivo y verbo (clases de palabras) no puede haber oración y hay mucha razón en su afirmación. Platón considera el sustantivo como el sujeto y rema, como el verbo. Modernamente, lo que Platón considera onómato o sustantivo se plantea como sintagma nominal (SN); y rema se plantea como sintagma verbal (SV). Es decir, según la gramática generativa, la oración se designa como SN + SV, porque el sujeto no solamente puede estar formado por un sustantivo, sino por una frase o sintagma; lo mismo el verbo puede estar solo o por una perífrasis verbal. Sin embargo, Platón se acerca en su planteamiento de los elementos fundamentales de la oración, con el planteamiento de la gramática generativa. A continuación me referiré a los argumentos del verbo.

Pero también debe tomarse en consideración que los argumentos del verbo reciben caso abstracto por el mismo verbo. Por lo tanto, hay que diferenciar entre el caso morfológico que existía en griego y en latín, los cuales eran expresados por la terminación de la palabra. Así, se hablaba de caso nominativo, genitivo, acusativo, etc. En tanto que el caso abstracto se refiere a la distribución y posiciones dentro de la oración en las que pueden aparecer los sintagmas nominales asignados por el verbo, en primer lugar, o por la preposición, en segundo lugar.

La gramática generativa, formulada por el lingüista estadounidense Noam Chomsky, considera el verbo como la parte esencial de la oración gramatical. Lógicamente, el verbo (y la preposición) son los únicos elementos de la oración que asignan caso abstracto a los demás sintagmas. No olvidemos que la gramática generativa también toma en cuenta la semántica (o el significado) de la oración. Entonces, un verbo transitivo asigna un caso externo, el sujeto; y un caso interno, el complemento u objeto directo. Hablamos de caso externo, porque el sujeto está fuera del sintagma verbal; pero el argumento interno sí está dentro del sintagma verbal. Por ejemplo:

Pedro             construye      casas
Sujeto             Vtransitivo     Objeto directo
Pedro (SN)    construye casas (SV)

Como puede verse, el sustantivo Pedro está fuera del (SV construye casas); por otro lado, el sintagma verbal está constituido por el verbo (construye) más el objeto directo: (casas). Hasta aquí he simplificado la explicación del argumento externo y el interno. Sin embargo, un verbo transitivo puede poseer más de un argumento interno, como ser el complemento directo, el indirecto y los complementos adjuntos, llamados circunstanciales. Sin embargo, los adjuntos no son complementos obligatorios del verbo.

Se llama estructura argumental a los complementos exigidos y regidos por un verbo. Ya he hablado de los argumentos de un verbo transitivo: sujeto, complemento directo y complemento indirecto. Sin embargo, también la preposición asigna caso abstracto, además del verbo. Por ejemplo:

            Pedro construye casas, se trata de una oración gramatical, por cuanto el verbo asigna caso abstracto al sujeto y al complemento u objeto directo; pero si escribimos la oración;

            *La construcción casas, es agramatical porque dos sustantivos yuxtapuestos o uno tras el otro, no tienen asignación de caso. Se necesita la presencia de la preposición DE para que sea ésta la que lo asigne. Ejemplo:

            La construcción de casas, sí es gramatical porque la preposición DE asigna caso al sustantivo plural CASAS y de hecho, forma un complemento preposicional que modifica al sustantivo “construcción”. Por tanto, el sustantivo plural “casas” depende de la preposición DE y no del sustantivo abstracto “construcción”.

Por otro lado, el verbo, como núcleo esencial de la oración, también tiene un carácter semántico. Es decir, un verbo al asignar caso toma en cuenta el significado del léxico que exige como sujeto. Por ejemplo:

            Pedro construye casas

El sujeto (Pedro) semánticamente es un agente humano que ejecuta la acción con conciencia (un acto volitivo); pero si decimos:

            La tormenta               destruyó         las casas
            Sujeto                         Vtransitivo     Objeto directo

Aunque estructuralmente hay un parecido con la oración anterior (Pedro construye casas), la tormenta, que es el sujeto de esta oración, semánticamente no es un ser humano; por lo tanto no ejecuta ninguna acción sino que se convierte en la causa de la destrucción. Por lo tanto, no se trata de un sujeto agente.

Otro tipo de sujeto, según la característica semántica del verbo, es el sujeto experimentante. Por ejemplo:

            El niño           duerme                      en la cuna
            Sujeto             Vintransitivo              Complemento adjunto o locativo

Por supuesto, la oración anterior posee un verbo intransitivo, y, específicamente, se trata del verbo DORMIR. Queda claro que el sujeto (El niño) no ejecuta la acción de dormir, sino que la experimenta; por lo tanto, como se trata de un verbo intransitivo, no asigna un complemento directo. Esta facultad la poseen solamente los verbos transitivos.

He dicho antes que los complementos adjuntos no son argumentos obligatorios del verbo como lo son el complemento directo y el complemento u objeto indirecto. Tampoco debemos olvidar el carácter semántico del verbo dormir, el cual asigna caso a un sujeto animado, en este caso, humano. Pero hay casos en que el verbo dormir se utiliza metafóricamente. Ejemplo:

            El juicio duerme el sueño de los justos

Además de contener un pleonasmo, porque lo que se duerme es el sueño, se trata de una metáfora. Gramaticalmente el verbo dormir no asigna caso de complemento directo por cuanto es intransitivo; por eso, se trata de una metáfora como queda dicho. Otro ejemplo del mismo verbo utilizado metafóricamente es:

            El borrachito duerme la mona
            La madre duerme al niño

Ambas oraciones son metafóricas, porque contienen un objeto directo, cuando se trata de un verbo intransitivo.

Aunque no pretendo haber tratado el tema de los argumentos del verbo con la profundidad necesaria, sí he presentado los elementos básicos para su ilustración. No olvidemos, que el verbo asigna caso abstracto al argumento externo, el sujeto; y asigna caso abstracto al argumento interno, el complemento directo, en el caso de los verbos transitivos. Tampoco debemos obviar el papel de la semántica en la asignación de casos. Además, como queda dicho, el otro elemento capaz de asignar caso es la preposición.

He decidido abordar este tema con el fin de ilustrar las diferencias que hay entre el enfoque de la gramática tradicional y el de la gramática generativa en cuanto al concepto y función del verbo en la oración; y espero que le sirva a aquellos que se preocupan por mantenerse actualizados en temas gramaticales.




sábado, 7 de noviembre de 2015


EL TEATRO NACIONAL RUBÉN DARÍO PRESENTA “LA NOVICIA REBELDE”
Amadeo Albuquerque Lara

Según El Nuevo Diario en su edición de hoy sábado 7 de noviembre, el Teatro Nacional Rubén Darío pondrá en escena el musical “La novicia rebelde” el 11 y 12 de este mes, en ocasión de cumplirse 50 años desde que la película taquillera se presentó por primera vez.
El título original en inglés es “The Sound of Music” (1965), el cual fue traducido al español como “La novicia rebelde”. Sin embargo, esta traducción no le hace mérito al mensaje central de la película, el cual es que la música produce un impacto positivo y un cambio en la vida del Capitán von Trapp, desempeñado por el actor Christopher Plummer y la actriz Julie Andrews.

El Capitán de Navío, von Trapp es viudo y cría a sus siete hijos (niños y niñas) como si estuvieran en una academia militar. Al sonido de un silbato emitido por el Capitán, los niños forman fila para la comida y para la hora de ir a dormir. Sin embargo, el Capitan von Trapp contrata a una institutriz que se encargue del cuido y educación de sus hijos e hijas. Resulta que la institutriz, papel desempeñado por la actriz Julie Andrews, una novicia recluida en un convento, se convierte en la persona que introduce la música en la vida de los hijos del Capitán. Comienza por enseñarles las notas musicales y luego los enseña a cantar. Los niños se interesan tanto en la música que cambian su hostilidad hacia su institutriz y se convierten en aliados de ella. Aunque el capitán al principio se opone al método empleado por la institutriz, al final él toma la guitarra y revive su antiguo talento musical. Se casa con la joven institutriz y forma coro con los niños y presentan musicales como familia.

Corto aquí el asunto sin referirme al final, porque me interesa demostrar que es el impacto de la música el mensaje principal de la película. El capitán von Trapp cambia su actitud de imponer una rígida disciplina militar con sus hijos, a una armonía familiar. La música hace cambiar sus planes de matrimonio con la Baronesa de Austria para casarse con la joven institutriz.A su vez, la institutriz introduce la música en la familia y con la música ocurre el cambio en el férreo viudo Capitán de Navío.


Así que el título “La novicia rebelde” no transmite el sentido que encierra el título original “The Sound of Music” (literalmente, el Sonido de la Música”), pero yo diría más bien: “El Impacto de la Música”. Es el impacto de la música en la vida del Capitán, es el sonar de los cantos del coro de los niños lo que impulsa al rígido Capitán de Navío a tomar su guitarra y unirse al coro infantil. Es la música, en fin, la que convierte la pequeña “academia militar” en un grupo musical de familia.